El Instituto de Biomedicina de Sevilla junto con el Ragon Institute han llevado a cabo un estudio pionero en personas con VIH que pueden controlar el virus sin necesidad de tratamiento.
En el estudio se identificaron dos subgrupos de controladores de élite del VIH: aquellos que pierden el control de la carga viral y aquellos que lo mantienen de forma indefinida. Se encontró que los que pierden el control tienen virus integrados en zonas del genoma de la célula accesibles a la maquinaria celular, mientras que quienes lo mantienen presentan niveles significativamente menores de virus completos en su organismo.
Se especula que algunos controladores persistentes podrían estar curados del VIH, ya que no se encuentran virus completos o si se detectan están en niveles muy bajos y no son infecciosos. El estudio, publicado en la revista The Journal of Clinical Investigation, fue financiado por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades y la empresa biotecnológica Gilead.
El objetivo de esta investigación es encontrar dianas para desarrollar inmunoterapias que permitan a la mayoría de las personas con VIH controlar el virus de la misma forma que lo hacen los controladores persistentes, en un intento de llegar a la cura de la infección.