El trabajo de los equipos de extinción en Tenerife ha sido fundamental para evitar que el fuego arrasara viviendas. El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha calificado el resultado como casi un milagro.
A pesar de que el fuego ha afectado algunas áreas, hasta el momento no se ha reportado ningún incendio en viviendas. Sin embargo, alrededor de 8.400 hectáreas han sido afectadas y el perímetro del incendio abarca unos 70 kilómetros en once municipios.
El número de personas evacuadas asciende a 12.279, aunque esta cifra está por debajo de las 26.000 estimadas inicialmente. Los desalojos se llevaron a cabo en los municipios de La Orotava, La Matanza, La Victoria, El Sauzal, Santa Úrsula y Los Realejos.
El incendio ha mantenido en alerta a las autoridades y a los residentes de la isla de Tenerife durante varios días. Los equipos de extinción han trabajado incansablemente para controlar las llamas y proteger la vida y la propiedad de los ciudadanos.
La rápida coordinación entre los equipos de bomberos, aviones y helicópteros ha sido esencial para contener el fuego y evitar una tragedia mayor. Los intensos esfuerzos de los trabajadores han sido aplaudidos por la comunidad local y nacional.
El presidente Clavijo ha expresado su agradecimiento a todos los involucrados en la lucha contra el incendio y ha destacado la importancia de seguir fortaleciendo las medidas de prevención y extinción en toda la región.
A medida que el fuego avanza y las condiciones climáticas cambian, los equipos de extinción continúan trabajando arduamente para controlar y extinguir completamente el incendio. Se espera que en los próximos días la situación mejore y se pueda declarar el incendio como completamente sofocado.
La comunidad local ha mostrado su unidad y solidaridad en estos momentos difíciles, ofreciendo apoyo y ayuda a los afectados. Las autoridades también han garantizado que se ofrecerán los recursos necesarios para la rehabilitación y reconstrucción de las zonas afectadas una vez que el fuego esté controlado.
Toda la isla de Tenerife está en deuda con los valientes equipos de extinción y con la colaboración y apoyo de la comunidad. Juntos, han logrado evitar una tragedia mayor y trabajarán para proteger y reconstruir el hermoso entorno de la isla.
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