En su envoltura amarilla y roja, Marabou ha sido el chocolate favorito de Suecia durante más de cien años. Crece con ellos y los compra toda su vida. Sin embargo, para muchos tocarlo ya no es una cuestión. Como todas las demás marcas del Grupo Mondelez International, Marabou ha sido objeto de un boicot sin precedentes en Suecia y Noruega, ya que la agencia anticorrupción ucraniana añadió a la multinacional estadounidense a su lista. «Partidarios de la guerra internacional»25 de mayo de 2023.
Kyiv criticó a Mondelez por mantener sus operaciones en Rusia tras la invasión de Ucrania. Uno de los líderes mundiales en la industria alimentaria, número uno en el mercado de galletas en Francia, propietario de LU, Prince, Oreo y Côte d’Or: el grupo tiene tres fábricas que emplean a 3.000 personas. Según la agencia anticorrupción de Ucrania, Mondelez pagó 61 millones de dólares en impuestos (55,8 millones de euros) al gobierno ruso en 2022.
En abril, se convocó un boicot en Suecia contra Absolut Vodka, propiedad de Pernod Ricard, lo que provocó que el grupo de bebidas espirituosas retrocediera rápidamente después de reanudar sus exportaciones a Rusia. Esta vez, la compañía aérea Scandinavian Airlines fue la primera en reaccionar, anunciando el 8 de junio que ya no serviría productos de Mondelez en sus vuelos. Sus rivales Noruega y Widero hicieron lo mismo de inmediato.
No más chocolates en estadios o trenes
La Asociación Noruega de Fútbol ha anunciado que ya no venderá la marca de chocolates y pasteles Freya, tan popular en Noruega como Marabou en Suecia, en los estadios, mientras que la Asociación Noruega de Senderismo ha decidido poner fin a su cooperación con el proveedor. Kvikk Lunsj, el snack oficial de los senderistas noruegos desde hace cincuenta años.
En Suecia, la compañía ferroviaria Statens Järnväger (SJ) continuó el movimiento el 10 de junio al eliminar el Marabou Chocolate y el O’Boy Chocolate Milk del menú de sus vagones restaurante. Unos días después, Parks and Resorts, propietaria de varios parques de atracciones y zoológicos en Suecia, se unió al boicot, seguida de la naviera Stena Line, que opera 39 transbordadores en Europa, y el gigante de los muebles Ikea.
Más inusualmente, el 13 de junio, las Fuerzas Armadas Suecas anunciaron que ya no harían un pedido a Mondelez. «Durante el último año, hemos apoyado a Ucrania de diferentes maneras y esta es otra forma de brindar nuestro apoyo»La portavoz Guna Grafelds explicó que las acusaciones formuladas por Kiev a la empresa estadounidense «grave».
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