La Comisión Europea ha dado luz verde a una nueva vacuna contra el COVID-19 desarrollada por Novavax, la cual lleva por nombre Nuvaxovid y ha sido adaptada específicamente para la variante Ómicron XBB.1.5. Esta vacuna se administra en una sola dosis y está dirigida a personas mayores de 12 años, sin importar su historial de vacunación anterior.
Es importante resaltar que Nuvaxovid es la única vacuna basada en proteínas sin ARNm que ha sido actualizada en la Unión Europea. Además, ofrece protección no solo contra la variante XBB.1.5, sino también contra las variantes XBB.1.16 y XBB.2.3, así como las subvariantes BA.2.86, EG.5.1 FL.1.5.1 y XBB.1.16.6.
Sin embargo, como con cualquier vacuna, se han reportado efectos adversos en algunos casos. Los más comunes incluyen dolor de cabeza, náuseas, dolor muscular, dolor en las articulaciones, sensibilidad y malestar en el lugar de la inyección, así como fatiga.
Ahora corresponderá a las autoridades nacionales determinar cómo utilizar esta vacuna en las campañas de vacunación, teniendo en cuenta diversas variables como las tasas de infección y hospitalización, el riesgo para las personas vulnerables y la disponibilidad de la vacuna.
Ante la aparición de la subvariante XBB.1.5 de la cepa Ómicron, epidemiólogos recomiendan el uso de las vacunas más actualizadas en la próxima temporada y la administración de vacunas monovalentes específicamente dirigidas a esta subvariante.
En conclusión, la aprobación de la vacuna Nuvaxovid por parte de la Comisión Europea representa un avance importante en la lucha contra el COVID-19. Esta vacuna, adaptada a la variante Ómicron XBB.1.5, ofrece protección frente a diversas variantes y subvariantes del virus. Ahora es responsabilidad de las autoridades nacionales determinar cómo implementarla en las campañas de vacunación. Se espera que su uso contribuya a controlar la propagación del virus y a reducir la carga de enfermedad en la población.