La literatura infantil como arma ideológica durante la Guerra Civil Española
Durante la Guerra Civil Española, la literatura infantil y juvenil se convirtió en una poderosa herramienta de propaganda ideológica, según revela la investigación de Jaime García Padrino, recogida en su libro publicado por Renacimiento. En este estudio, se destaca cómo autores como Antoniorrobles transmitían mensajes a favor del bando republicano a través de sus historias, mientras que Elena Fortún denunciaba los horrores y desigualdades de la guerra en sus cuentos.
García Padrino analiza la literatura infantil y juvenil desde 1875 hasta 2015, resaltando la influencia política en las obras. Durante la Guerra Civil, los libros para niños reflejaban la división ideológica y la manipulación de las mentes más vulnerables, convirtiéndose en herramientas de proselitismo político.
Un ejemplo de esto es la portada de un cuento de Antoniorrobles editado durante la Guerra Civil, que demuestra cómo la literatura era utilizada como arma para influir en las creencias de los más jóvenes. Los libros para niños se convirtieron en una extensión de la propaganda de los diferentes bandos en conflicto, buscando adoctrinar a los más pequeños a través de historias y personajes que reflejaban los valores e ideales ideológicos de cada facción.
En resumen, la literatura infantil durante la Guerra Civil Española no solo reflejaba la realidad del conflicto, sino que también servía como instrumento para influir en las mentes de los niños y jóvenes de la época. A través de estas historias, se buscaba perpetuar las creencias y valores políticos de cada bando, convirtiendo a los libros en una herramienta más de la contienda.