La Unión Europea ha acordado la primera ley de Inteligencia Artificial (IA) del mundo, lo que tendrá un impacto en el desarrollo de la normativa a nivel global. Esta nueva ley busca regular el uso de la IA en diferentes sectores, especialmente en lo que respecta a la videovigilancia.
Se espera que las videocámaras con IA sean percibidas como aliadas para la seguridad y no como intrusivas. Por esta razón, el uso de grabaciones de las videocámaras estará condicionado a la autorización judicial previa y los datos solo se cruzarán con bancos de imágenes policiales. Se utilizarán para casos de eventos extraordinarios y para identificar personas implicadas en investigaciones de delitos graves.
Es importante destacar que los sistemas de categorización biométrica no tomarán en cuenta creencias políticas, religiosas, filosóficas, raza ni orientación sexual, garantizando así la igualdad y no discriminación.
Además, se prohíbe circular datos biométricos por bases de datos públicas y utilizar sistemas de reconocimiento de emociones en centros de trabajo o escuelas. Estas medidas buscan proteger la privacidad y evitar posibles abusos de la tecnología.
En cuanto a la transparencia en los contenidos proporcionados por la IA generativa, la UE promoverá que se implemente una denominación de origen para identificar la aportación de las máquinas. Esto permitirá que los usuarios sean conscientes cuando están interactuando con una IA y no con una persona.
Para que esta ley entre en vigor, el Parlamento Europeo deberá aprobar el documento de consenso antes de fin de año. Sin embargo, se estima que no se aplicará antes de 2026, ya que es necesario que las empresas de IA se adapten a las normas europeas una vez que el proyecto de normativa se traduzca al lenguaje jurídico.
España ha tenido un papel relevante en el proceso de negociaciones, y su secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial, Carme Artigas, ha sido seleccionada como parte del Órgano Consultivo de Alto Nivel sobre Inteligencia Artificial de las Naciones Unidas. Esto demuestra el liderazgo del país en el ámbito de la IA y su compromiso con el desarrollo de normas internacionales.
La regulación de la IA en la UE servirá de modelo para otros países fuera de la Unión, quienes podrán tomar como referencia estas normas para regular el uso de la tecnología en sus propios territorios.
En resumen, la Unión Europea ha acordado una ley de Inteligencia Artificial pionera en el mundo, con el objetivo de regular el uso de la IA en diferentes sectores. Esta normativa busca garantizar la seguridad y la privacidad de los ciudadanos, así como promover la transparencia en los contenidos generados por las máquinas. La entrada en vigor de esta ley se estima para el año 2026, permitiendo a las empresas de IA adaptarse a las nuevas regulaciones.